Te quiero ver desnuda,
te quiero sonriendo,
te quiero despertándote conmigo
y desayunando en el salón.
Te quiero frente al café,
te quiero entre mis brazos,
te quiero donde rompen las olas
y viajando por el Mundo.
Te quiero enfadada por mis manías,
te quiero feliz,
te quiero desordenándome la vida
y queriéndome a quemarropa.
Te quiero de tantas formas y en tantos lugares, que siempre que se me olvida lo que es “querer”.